El secretario general de la Organización de las Naciones Unidas (ONU), Ban Ki-moon, se despidió ayer de la República Dominicana tras agotar una apretada agenda, que tuvo como foco central el tema migratorio. Durante la reunión conjunta entre las cámaras congresionales celebrada en el salón de la Asamblea Nacional, Ban Ki- moon, elogió el papel asumido por el Gobierno frente a la problemática y exhortó a los senadores y diputados a continuar trabajando para resolver la apatridia y proteger los derechos de los extranjeros nacidos en territorio dominicano.
Parafraseando al forjador de la República, Juan Pablo Duarte, cuando dijo: “Sed justos lo primero, si queréis ser felices”, el diplomático felicitó a los legisladores por adoptar una legislación (Ley 169-14) para hacer frente a la situación de miles de extranjeros nacidos en el país.
Dijo que la misma representa un paso importante hacia el reconocimiento de la nacionalidad dominicana a esas personas, aunque advirtió que todavía queda mucho por hacer y que la tarea requiere de compromiso y consultas profundas.
“Les pido que perseveren en esta ardua labor para lograr un consenso que permita resolver la apatridia, proteger los derechos de todas las personas afectadas y evitar la privación de la nacionalidad”, expresó.
De igual manera, el secretario de la ONU, valoró las contribuciones del gobierno dominicano con el haitiano especialmente luego del terremoto que asoló al vecino país en el 2010 y el apoyo brindado a la Misión de Estabilización de las Naciones Unidas en Haití (Minustah).
Sostuvo que las Naciones Unidas seguirán comprometidas con Haití y anunció que en los próximos meses presentará al Consejo de Seguridad sus recomendaciones en torno a la presencia futura de ese organismo internacional en aras de garantizar la paz y la estabilidad.
Relaciones bilaterales son esenciales
Añadió que unas relaciones bilaterales fuertes entre RD y Haití son fundamentales para la prosperidad mutua y el desarrollo económico.
“Los posibles beneficios económicos derivados del comercio, la inversión y las relaciones económicas de ambos países son enormes, como el programa de desarrollo industrial CODEVI [Compagnie Développement Industriel en Haití] a lo largo de la frontera ha demostrado”.
Animó al país a seguir fortaleciendo el diálogo binacional, donde se ha podido avanzar en cuestiones complejas como el comercio, la cooperación contra el crimen organizado y asuntos aduaneros.
Reconoció que el país está trabajando para mejorar la vida de los migrantes y encomió el apoyo de sus asociados para ayudar a acelerar este proceso y aliviar la carga que pesa sobre las personas más vulnerables.
“Es imperativo que tratemos de asegurar que todos los hombres, mujeres y niños de la isla de La Hispaniola tengan la oportunidad de vivir una vida digna”.
Elogia papel de criollos
Haciendo gala de sus dotes diplomáticas, Ban Ki-moon, hizo mención a las huellas dejadas por los dominicanos en distintos campos alrededor del mundo:“Lo escuchamos en la música de Juan Luis Guerra. Lo leemos en la literatura de Junot Díaz. Lo vemos en las contribuciones de intelectos como la jueza Olga Herrera Carbuccia, miembro de la Corte Penal Internacional. Y lo marcamos todos los años el 25 de noviembre en todo el mundo. Gracias al liderazgo de la República Dominicana, la Asamblea General de las Naciones Unidas proclamó el Día Internacional de la Eliminación de la Violencia Contra la Mujer”.
Destacó la producción de figuras del béisbol de la talla de Juan Marichal, Pedro Martínez, David Ortiz, Robinson Cano, entre otros.
Pared: RD no discrimina a haitianos
El presidente del Senado, Reinaldo Pared Pérez, le expresó al secretario general de la ONU, que con sus altas y bajas la República Dominicana y Haití, han sobrellevado sus relaciones en hermandad y coexistencia pacífica.
“No es verdad. Absolutamente no es verdad, que aquí se discrimine al ciudadano haitiano por razones de raza o de color, como tampoco por asuntos de nacionalidad. Todo lo contrario. Hoy en día el nacional haitiano es una fuerza laboral en nuestro país de consideración, sobre todo en áreas y sectores muy importantes de la vida dominicana”, expresó.
Manifestó que a raíz de la sentencia 168-13 del Tribunal Constitucional, el país ha sido objeto y centro de una infamante, difamatoria y desconsiderada campaña en su contra “cuando lo que realmente se procura en puridad de verdad, es empezar a regular y transparentar de una vez y por todas, el grave problema migratorio que hemos padecido por décadas y décadas”.
Pared Pérez aprovechó el escenario para pedir la colaboración de la ONU para reforzar la vigilancia y supervisión de la “frágil e indefensa frontera” que sirve de canal al tráfico de armas, de personas, al narcotráfico y a todo tipo de inconductas y actitudes delincuenciales.
Recordó que la reunión con el diplomático un 16 de julio coincide con la fundación de la Sociedad Secreta La Trinitaria, germen que dio origen al surgimiento de la República Dominicana.
El senador por el Distrito Nacional dijo que haber obviado la trascendencia de este histórico día, solo es propio de dominicanos indignos, ruines e ingratos, sobre todo en las actuales circunstancias.
“Ki-moon le faltó el respeto al Congreso”
Vinicio Castillo Semán afirmó que el secretario general de la ONU, le faltó el respeto a los congresistas, cuando en su discurso reclamó el otorgamiento de la nacionalidad a los haitianos nacidos en el país. Visiblemente indignado, Castillo Semán criticó que Ban Ki-moon, englobara a los dos países dentro de La Hispaniola, lo que a su juicio, responde al interés de ese organismo de unificar la isla y que la República Dominicana asuma medio millón de haitianos. Dijo que con sus pronunciamientos, Ki-moon se inmiscuye en asuntos migratorios que le competen al país y llamó a los dominicanos a unirse para impedir la injerencia extranjera. Mientras que Minou Tavárez, opinó que no existe injerencia en recordar que se deben respetar los derechos humanos de los hijos de extranjeros.“Eso no atenta absolutamente ninguna soberanía. La soberanía desde mi punto de vista reside precisamente en el pueblo y el respeto a los compromisos que como naciones tenemos”, expresó.
Derechos humanos
En nuestro empeño en pro del desarrollo, tenemos que renovar nuestra promesa común de proteger los derechos humanos”.
Promesa
En los próximos meses, presentaré al Consejo de Seguridad mis recomendaciones sobre la futura presencia de las Naciones Unidas en Haití”.
