GOODYEAR, Arizona, EE.UU. (AP) — El taponero cubano de los Rojos de Cincinnati Aroldis Chapman fue sometido a una operación para reparar una fractura arriba de su ojo izquierdo pero no sufrió otras lesiones de consideración al ser golpeado en la cara por un pelotazo durante un juego de pretemporada.
“Es un tipo con mucha suerte”, comentó el médico del equipo Tim Krenchek.
Agregó que se le insertará a Chapman una placa de metal en el hueso, la cual quedará allí permanentemente. Indicó que el serpentinero sufrió una conmoción cerebral moderada, pero no tiene lesiones serias en el cerebro ni en el ojo.
Chapman tiró una recta de 99 millas por hora y el venezolano Salvador Pérez, de los Reales, conectó una fuerte línea en un juego del miércoles por la noche. La pelota dio de lleno en la cara de Chapman, quien cayó al suelo retorciéndose de dolor y fue sacado en camilla.
El cátcher Brayan Peña estuvo con Champan el jueves por la mañana y dijo que lo vio de buen ánimo.