Fueron los abusos de la tiranía del régimen de Trujillo, los que hicieron nacer en Zoila Violeta Martínez Guante la idea de ser abogada para defender a los más necesitados. La sólida educación basada en valores recibida de sus padres y las enseñanzas de sus amigos, despertó en ella el deseo perenne de ayudar a los demás tanto en su vida privada como desde los cargos públicos que ha ocupado a lo largo de su vida.
Su fe en Dios y su conciencia del mandato divino de amar al prójimo, han hecho de esta mujer un soporte para muchos que la visualizan como la primera defensora del pueblo constitucional que tendrá la República Dominicana.
Ella es una de las tres personas escogidas por la Cámara de Diputados y presentada al Senado para que escoja al Defensor del Pueblo como lo establece la ley 19-01 que instituye esa figura constitucional.
Fue propuesta por organizaciones de la sociedad civil, iglesias y ciudadanos que particularmente enviaron cartas al Congreso Nacional.
La doctora Martínez Guante de Medina se graduó de derecho en 1967. Tiene una especialidad en derecho procesal penal y desde hace más de 25 años trabaja junto al padre Luis Rosario con niños y adolescentes que deambulan por las calles.
Esta mujer de temple de acero y decisiones firmes, se dedicó a recorrer las cárceles para percatarse de las condiciones en que vivían los reos y halló mucha gente privada de su libertad por peccata minuta y mentiras, a los que dio apoyo y logró su retorno al seno de la sociedad.
Aunque por su condición religiosa visitaba las prisiones para llevarle palabras de aliento a los presos, algunos alimentos y comidas, en cumplimiento con el mandato de “ayudar al prójimo como a si mismo”, fue como fiscal que pudo hacer un trabajo más amplio y directo.
Su trabajo social ha sido merecedor de numerosos reconocimientos como las condecoraciones del Poder Ejecutivo que le entregó la medalla, Duarte, Sánchez y Mella en el grado Gran Cruz de Plata y la orden diplomática “Servicios Meritorios GWANGHWA” que otorga la República de Corea del Sur.
Otros reconocimientos los ha recibido del Colegio de Abogados del Distrito Nacional y Santiago y recibió el Premio Nacional al Mérito, Fray Antón de Montesinos. También otros de la Comisión de los Derechos Humanos, el Guachupita de Oro, Mujer del año, en 1990.
Hechos imborrables
Como fiscal del Distrito Nacional le tocó investigar el asesinato del niño José Rafael Llenas Aybar en 1996, poco tiempo después de haber perdido uno de cinco hijos, hechos que se mantienen como una estampa en su mente y corazón.
Además de fiscal, ha sido directora general de la cédula de identidad y personal, embajadora extraordinaria y plenipotenciaria de la República Dominicana en Corea y se ha destacado en la firma de abogados a la que pertenece.
De los hechos a las palabras
Su intensa vida social y las enseñanzas recibidas a través de los años motivaron a la doctora Martínez Guante a publicar uno siete escritos entre ensayos y libros.
Algunos son: “Manual Práctico de Orientación Diplomática”; Introducción a la Diplomacia”; “Dominicanas de Espíritu Indomable”; “Mujeres, Aportes y Sociedad”; “Balaguer y Yo”; “Temas del Diario Vivir” y “Un Grito de Indignación”.
Sensibilidad
“Tengo una gran preocupación por la gran cantidad de adolescentes embarazadas que hay en este país”.
Servicio
Si me muriera hoy, diría que sí, que me voy en paz, que pude haber hecho más”, dijo en una ocasión a una revista de circulación nacional”.
