Comercios toman el “tránsito en sus manos”

Santiago. El desorden generado por los choferes de concho ha obligado a que algunos negocios coloquen vigilantes privados que hacen el papel de la desaparecida policía de tránsito.

Santiago. El desorden generado por los choferes de concho ha obligado a que algunos negocios coloquen vigilantes privados que hacen el papel de la desaparecida policía de tránsito. Y es que muchos comercios ven perder sus clientes, molestos al ver cómo los conductores no dejan espacios para entrada o salida.

En el caso de la estación Texaco de la avenida Estrella Sadhalá con 27 de Febrero, debajo del elevado, ésta  decidió contratar seguridad privada para  ordenar  el tránsito.

Desde hace dos meses, Bradwin Manuel Rodríguez se coloca un casco de policía de tránsito, un silbato y una macana y se para en la acera para impedir que los choferes de concho paren sus vehículos.

Sobre el uniforme, Bradwin se coloca un chaleco de una compañía de seguridad privada.

“Aquí fueron muchos los clientes que se iban, al no encontrar espacio para entrar o salir, porque los choferes se apropiaba de toda la acera”, expresa Rodríguez al ser entrevistado por reporteros de elCaribe. Dice que desde que comenzó a ordenar, la situación ha cambiado.

Otros propietarios de negocios y grandes comercios del casco urbano han optado por asumir la misma medida para evitar el desorden que provocan los taxistas y los carros de concho.

Organización

Usuarios también valoraron como positivo que los grandes comercios decidan organizar el paso hacia sus comercios, pues permite que sus clientes lleguen a éstos con mayor facilidad.

Sin embargo, otros cuestionaron que utilicen seguridad privada para ejercer un trabajo que deben realizar los agentes de la Autoridad Metropolitana de Transporte.

En el centro histórico, los propietarios de tiendas, han optado por colocar  objetos para impedir que los taxistas ocupen los espacios de los clientes, tras quitar los parquímetros en las principales vías.

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