En la zona fértil del valle de la provincia San Juan, la producción agropecuaria representa la principal fuente de ingresos para una población que supera los 232 mil habitantes.
En el “granero del Sur”, llamado así por su amplia producción de granos (habichuelas, maní, maíz, guandul, café), se cultiva alrededor del 80% de las habichuelas que se consumen en el mercado local, y hasta hace poco también se situaba como la productora del 15% de todo el arroz que se cultivaba en el país.
Atendiendo al potencial de la zona, las autoridades se plantean modernizar la agropecuaria, así como diversificar la producción e instalar un amplio sistema de invernaderos, mientras que en lo inmediato, los productores están más preocupados por las dificultades de financiamiento y el proceso de involución que se registra en el sector.
Cuando hablamos de presencia porcentual en el PIB de los diferentes sectores en la economía, en República Dominicana el sector agropecuario registra una participación de un 8.8% en el 2002 y un 7.6% en 2011, según datos suministrados por el Ministerio de Agricultura. Mientras el Centro de Exportación e Inversión de la República Dominicana (CEI-RD) en su informe enero/noviembre 2010-2011, registra que los productos agropecuarios experimentaron un crecimiento de un 19.63% y el valor exportado fue de US$291.32 millones.
En una carpeta de necesidades elaborada para el presidente Danilo Medina, copia de la cual reposa en la Gobernación provincial, los sanjuaneros plantearon en materia de agricultura al menos 30 propuestas, entre ellas la canalización de recursos, revisar el programa de pignoración y reconvertir la agricultura para saber qué deben sembrar y a quien se venderá.
Sistemas de invernaderos
El Ministerio de Agricultura tiene en carpeta un proyecto para producir vegetales bajo ambiente controlado con fines de exportación.
“La tarea pendiente que tenemos es diversificar la producción agropecuaria. En una primera etapa nos proponemos estimular la siembra de más de un millón de metros cuadrados de invernaderos para producir vegetales de exportación, de esa forma se transformaría la actividad económica en el valle de San Juan, y el país recibiría mayores beneficios en el ahorro de divisas”, indicó a elCaribe, el subdirector de agricultura en San Juan, Manuel Emilio Carrasco. “Si usted evalúa el costo de producción y los niveles de rendimiento, el productor obtiene muy pocos beneficios”, agregó.
Informó, además, que a través de la regional agropecuaria suroeste se está implementando un operativo de preparación en unas 110 mil tareas, para más de 5 mil productores para la siembra de habichuela, así como la producción de unos 15 rubros. Este operativo, gratis para los productores, costará al ministerio unos RD$50 millones. Dijo que se distribuirán unos 7 mil quintales de semillas de habichuelas negra y roja.
Productores piden mejorías
Pese a los esfuerzos de las autoridades, los productores entienden que el sector, responsable del 80% de los empleos de la provincia, se ha visto envuelto en un proceso de degradación económica.
“Este es un proceso que se ha venido incubando; digamos un proceso de quiebra del sector productivo fundamental mente por falta de crédito, porque quien aparece generalmente tiene precios de usura, un dinero a un 5% o 10% y no hay actividad productiva que lo soporte.
A esto se suma el problema de comercialización”, dijo Manuel Matos, presidente del comité agropecuario unitario de San Juan, que agrupa a 16 asociaciones de productores.
En ese sentido, plantea que el Gobierno compre con bonos las deudas que tienen los productores con el sector financiero informal, para liberarse y ser sujetos de crédito de la banca y luego se les refinancie.
También propone una cadena de intermediación, que no sea tan gravosa para el productor ni para el consumidor, y el uso racional de los suelos, porque cada vez es menor la cantidad de agua en los ríos.
“En el valle de San Juan unas 410 mil tareas están bajo riego. A lo sumo, se siembran 200 mil tareas de habichuela al año, y en los últimos cinco a seis años no han llegado a las 100 mil por los problemas señalados,” manifestó Matos, añadiendo que San Juan tiene potencial para alimentar a 36 millones de seres humanos.
Atribuyó a la política de importación que se promueve en el país la falta de incentivos y crédito a la producción, en desmedro de la producción local. “El sector intermediario hace con nosotros lo que quiere, amenazándonos con importación, y nos pagan precios irrisorios con la cosecha”, dijo Matos al señalar que esperan una respuesta a sus necesidades. l
Productores revelan sus prioridades
Los productores exigen al Gobierno la instalación de plantas de lavado, empaque y almacenamiento, la construcción de cuatro naves para el almacenamiento de 100 mil quintales de cebolla e introducir variedades con fines de exportación. También fomentar y rehabilitar las villas cafetaleras en El Cercado, Hondo Valle y Arroyo Cano, y reforzar el acuerdo con Petrocaribe.
