BOGOTA (AP) — Una bomba mató la víspera a dos personas —entre ellas un bebé de ocho meses— y seis heridas en el sur de Colombia, dijeron las autoridades el sábado, al ofrecer una recompensa de unos 50.000 dólares para quienes entreguen información que permita ubicar a los responsables.
El ataque fue perpetrado alrededor de las 9 de la noche del viernes (0200 GMT del sábado) contra el puesto policial del municipio de Orito, departamento de Putumayo, ubicado a unos 540 kilómetros al suroeste de Bogotá.
«Este atentado terrorista cobró la vida de dos personas: la esposa del señor capitán comandante de la estación… y de su querido hijo de escasos ocho meses», explicó a la emisora local RCN el general Rodolfo Palomino, director de Seguridad Ciudadana de la Policía Nacional.
El oficial dijo sospechar de guerrilleros del frente 48 de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC).
«De este atentado aleve igualmente nos quedan heridos cuatro policías y dos particulares. Uno de ellos es el otro hijo de dos añitos del señor capitán y un particular que en ese momento se encontraba en la estación de Policía», agregó Palomino.
«En solidaridad con las víctimas…, estamos haciendo un ofrecimiento de una recompensa de hasta 100 millones de pesos (unos 50.000 dólares) para quien con su información nos permita llegar a la captura y judicialización de quienes perpetraron este atentado», añadió.
Algunos de los heridos, precisó Palomino, fueron trasladados al hospital de la Policía en Bogotá.
La alcaldesa de Orito, Argenis Velásquez, relató en diálogo telefónico con The Associated Press que en el momento del atentado se encontraba en su casa. «Se escuchó la explosión. Todos nos sorprendimos porque no sabíamos qué pasaba. Fue un artefacto que colocaron en la estación de Policía, que quedó totalmente destruida», agregó.
Velásquez dijo que edificaciones aledañas al puesto de Policía también sufrieron daños. «Todo el mundo en Orito está sorprendido, como paralizado, porque este municipio ha sido muy sano».
«El capitán de la Policía era nuevo en Orito. No tengo el nombre, pero hace sólo dos o tres días estaba en el municipio. Yo tuve la oportunidad de cruzar con él unas palabras y lo felicité por haber llegado al municipio y le dije que este municipio era muy tranquilo, muy sano», dijo.
