La Administración Federal Antidrogas (DEA por sus siglas en inglés) se propone confiscar los bienes del piloto asesinado Santos Seda Rodríguez, quien se disponía a llevar desde el Aeropuerto Internacional Las Américas un cargamento de 58 paquetes de cocaína a Puerto Rico.
El diario puertorriqueño El Nuevo Día informó este jueves que Seda Rodríguez era propietario de Jeshua Air Services, una empresa de aviación con sede en el aeropuerto Rafael Hernández de Aguadilla de la vecina isla. La DEA pretende confiscar de forma administrativa aviones, vehículos y embarcaciones del occiso.
“Una confiscación administrativa es cuando existe causa probable de que esas propiedades fueron obtenidas gracias a actividades ilícitas y se hace para asegurar que no van a ser vendidas ni transferidas a terceros”, explica el diario de Puerto Rico.
La información original indica que días después de que apareciera el cadáver del piloto en el país, agentes de la DEA visitaron la sede de la empresa del occiso en Puerto Rico para investigar los aviones. Los perros del organismo detectaron que en algún momento, en seis de los siete aviones del Seda Rodríguez –el séptimo fue donde la Dirección Nacional de Control de Drogas encontró la droga- había droga ilegal.
