Santiago. La Cámara de Comercio y Producción de Santiago citó entre los retos a enfrentar para el nuevo año: mejorar la inversión en educación y una reforma fiscal integral.
Con la reforma integral, la Cámara de Comercio y Producción de Santiago espera que se incentive el desarrollo de los sectores productivos para, a su vez, ajustar el marco legal dominicano, de manera que se haga más competitivo y motorice la creación de empresas, la actualización del Código Laboral, la regulación del transporte y las distorsiones por subsidios.
“En el 2012 estamos abocados a reorientar el sistema energético y propiciar unas elecciones presidenciales que transcurran con armonía a pesar de los fanatismos políticos”, dijo María Victoria Menicucci, presidenta de la institución.
Agregó que el Gobierno que resulte electo necesitará la cordura y sabiduría para enfrentar una difícil situación financiera internacional y una resaca económica post-electoral que requerirá de las mejores habilidades, consensos y prudencia.
Pidió ofrecer un apoyo real al sector turístico, integrándolo con la producción nacional.
La Cámara de Comercio propuso el apoyo a programas como la Iniciativa Participativa Anti-Corrupción, la carrera pública y administrativa del Ministerio de Administración Pública, las acciones del Consejo Económico y Social, así como la aprobación y aplicación de la Estrategia Nacional de Desarrollo.
Consideró importante e imprescindible poner freno al endeudamiento improductivo.
Dijo que no es posible usar la capacidad de endeudamiento “que conservamos para comprometer el trabajo de las futuras generaciones sin brindarles mayores capacidades”.
Creación de empleos
Por igual, trabajar en la conversión del sector de zona franca, donde siguen existiendo oportunidades de desarrollo, creación de empleos y transferencia de tecnología.
“A nivel de las actividades y acciones públicas, necesitamos transparencia total. No hay forma que nos desarrollemos como nación, con acciones turbias, ocultas, por debajo de la mesa, con cortapisas”, puntualizó Menicucci.
Dijo que pese a la estabilidad, la ineficiente inversión en educación y la mala estructuración del sistema financiero no garantizan que este comportamiento sea sostenible en el futuro inmediato.
Al hacer una evaluación sobre el año 2011, indicó que la economía dominicana mantuvo estabilidad permitiendo el desarrollo de los negocios, la creación de nuevas empresas y la captación de inversión extranjera en montos importantes, que mantienen a la nación como líderes en este renglón en Centroamérica y el Caribe.
Menicucci expresó que a nivel institucional se mantiene la duplicidad de funciones, el exceso de personal improductivo y la falta de seguimiento y orientación adecuada para mejorar la producción e identificar los nichos de mercado para los productos locales.
Otra de las preocupaciones es el crecimiento de las actividades relacionadas con el narcotráfico que han venido causando estragos en la sociedad y en todos los ámbitos del quehacer nacional, incluyendo las instituciones llamadas a preservar el orden y la justicia.
Menicucci manifestó que en términos de la provincia, Santiago no escapa a la realidad antes señalada.
“En términos de la provincia, Santiago no escapa a la realidad antes señalada. Como centro económico y comercial de toda la región, recibe poca inversión estatal en infraestructura”, dijo.
Inversión estatal
En otro orden, la presidenta de la Cámara de Comercio y Producción de Santiago resaltó que como centro económico y comercial de toda la región, esta provincia recibe poca inversión estatal en infraestructura, pese a que aporta el 16 por ciento del producto interno bruto a la nación.
Entiende que se hace necesario invertir en obras prioritarias para el desarrollo de la nación.
Piden parar la carrera de endeudamiento
Los empresarios agrupados en la Cámara de Comercio y Producción de Santiago, cuestionan el endeudamiento alegre externo, interno y con bonos soberanos.
En ese sentido, el documento refiere que los empréstitos han disminuido grandemente la disponibilidad para emprender inversiones necesarias para aumentar la productividad y la competitividad que se requiere y readecuar la producción local a los mercados externos.
