Una red de proxenetas está captando en Santiago a menores de entre 12 y 16 años. Sus verdugos las ofrecen a extranjeros en burdeles de zonas turísticas donde las obligan al trabajo sexual y algunas salen embarazadas y desconocen quién es el padre de la criatura.Como parte de la lucha librada por las organizaciones feministas y los grupos comunitarios de Cienfuegos, las instituciones comienzan a detectar nuevos negocios de prostitución que se dedican a reclutar a las adolescentes para ofrecerlas, como si se tratara de mercancías, al mejor postor.
Marielis es una de las tantas víctimas de explotación. Cuando apenas tenía 14 años fue reclutada por la red. Hoy, a sus 18 años, solo tiene espacio para el arrepentimiento, pues asegura que lo que vivió fue una verdadera pesadilla.
JM, nombre ficticio de una de las menores abusadas, con apenas 15 años, ha salido embarazada en dos ocasiones, pero por la forma en que ocurrieron las relaciones sexuales no logra saber quién es el padre de ambos niños.
La menor narró vía telefónica a elCaribe cómo muchas de las que son conquistadas para trabajar en burdeles, ahora se prestan como proxenetas para sonsacar a otras niñas de la barriada.
Uno de los centros de reclutamiento opera en una comunidad del norte de Santiago y, según denuncias, los proxenetas tras mantener a las adolescentes en cautiverio por varios días y las convierten en trabajadoras sexuales en sitios de diversión en los polos turísticos.
Tan solo el Núcleo de Apoyo a la Mujer junto a expertos de la organización Internacional de Trabajo (OIT) lograron rescatar 50 niñas, que desde 2008 eran reclutadas por los proxenetas.
El mayor temor que enfrentan los representantes de organizaciones comunitarias son las amenazas que ahora reciben de parte de aquellos que se lucran del negocio. El pastor Pablo Ureña es el que más amenazas ha recibido, por lo que ayer un grupo encabezado por asociaciones feministas decidió apoyarle y advertir que saben a quién responsabilizar de cualquier cosa que pueda sucederle.
Puede sonar fantástico, pero muchas veces las amenazas a los que tratan de combatir el trabajo sexual de las menores provienen de los padres de las menores, pues algunos reciben cierta cantidad de dinero de parte de los proxenetas. Hay familias que consideran normal y se sostienen de la explotación de una hija adolescente.
El pasado domingo la magistrada Yisel Naranjo, del Juzgado de Atención Permanente de Santiago, dictó prisión preventiva contra Amarfis Altagracia Tavares, acusada de ser una de las principales auspiciadora de prostitución de menores. Presuntamente es una reconocida manejadora de burdeles.
En 2008 fue sometida por intentar prostituir a 50 menores. elCaribe publicó que al menos son cien los casos de menores convencidas para el trabajo sexual. El pastor José Ramón de la Cruz atribuye a la marginación social que muchas jóvenes vendan su cuerpo a cambio de “la limosna que reciben de aquellos que se enriquecen con su sudor”.
Reclaman acciones en cienfuegos
Pablo Ureña
Pastor
“Lo que sucede con estas menores es un mal de muchos años, que parece que solo nosotros, los comunitarios, conocemos, pues nadie más hace nada para enfrentar a los proxenetas que se han constituido en bandas peligrosas de enfrentar”.
José Ramón de la Cruz
pastor
“La pobreza en estas comunidades de Cienfuegos juega un papel importante para sonsacar a nuestras niñas y meterlas en la prostitución. Pensamos que hacen falta políticas para hacerles sentir que ellas valen mucho” .
Baja escolaridad
La mayoría de adolescentes que fueron explotadas sexualmente tienen baja formación académica. Algunas solo cursaron el quinto grado de educación primaria; otras apenas saben leer y escribir, pues las condiciones de marginalidad las llevan a desertar.
Según el pastor De la Cruz, si existe alguna culpabilidad en que muchas se expongan al peligro de ser agredidas, responde a la falta de políticas claras de parte de las autoridades.
Asegura que muchas son presas fáciles de los proxenetas que al ver las condiciones de miseria, con una suma irrisoria de dinero logran infundir el deseo de pretender obtener cosas que con el trabajo digno no pueden lograr. Basilio Peralta es el presidente de la junta de vecinos del sector La Piña, una de las comunidades más asediada por los que prostituyen menores.
Advierte que muchas veces las mismas autoridades conocen esta situación, pero se hace poco, a menos que las soluciones provengan de las mismas organizaciones comunitarias que se resisten ver sus barriadas sucumbir.