La exportación de 30,000 toneladas de arroz que hizo el país el año pasado, le costó al Estado RD$586 millones, deuda que mantiene el Ministerio de Agricultura con el Banco de Reservas y que implica el pago de RD$8 millones mensuales en intereses.
La deuda acumulada es porque el Gobierno tuvo que asumir la diferencia entre el alto precio local del arroz y el valor al que hubo que venderlo en el mercado mundial.
Ese sacrificio económico del Gobierno fue para reducir una parte de los excedentes de arroz que se habían acumulado, pero a cambio los productores tenían que comprometerse a reducir sus áreas de cultivo, lo cual no cumplieron y por eso ahora hay nuevos excedentes que presionan el mercado.
Para tener una idea, los productores acordaron en la Comisión Nacional Arrocera que en julio iban a sembrar 320,000 tareas de arroz, pero sembraron 700,000; mientras que en agosto se acordó no sembrar ni una sola tarea, pero los productores, contando con que tendrían en el Estado garantía segura de compra, sembraron 230,000 tareas.
A la deuda que mantiene Agricultura con el Banco de Reservas, la cual le será descontada de su partida presupuestaria correspondiente al próximo año, se agrega el compromiso de pago de la pignoración, que suma RD$563 millones, recursos que serán pagados con bonos de Hacienda. Esa pignoración corresponde a una parte del año 2009 y el año 2010 completo. La contabilidad de 2011 no se ha hecho, por lo que todavía no se calcula como deuda.
Los excedentes en la producción de arroz deberían ser una buena noticia, pero no es así, pues ese alimento se cultiva con un elevado costo, muy por encima de su valor en el mercado mundial. Dada esa situación, el Gobierno se compromete a cubrir costos de almacenamiento, seguro y tasa de interés de la inversión que hacen los molineros para comprarle las cosechas a los productores. Ese costo es lo que se conoce como la pignoración.
La crisis es de precios
Luego de violar el acuerdo con las autoridades, de no producir más de lo necesario, los productores entraron en un debate con los molineros, exigiendo el pago de RD$2,050 mínimo por la fanega de 120 kilos, mientras los molineros ofrecían RD$1,950.
En ese debate estuvieron hasta el mes pasado, pero ahora, bajo la presión de que el arroz no dura en finca, los productores están entregándolo a razón de RD$1,750 la fanega, pues es lo que los molineros están dispuestos a ofrecer. Por no transarse a tiempo, ahora están vendiendo la fanega con pérdidas, entre RD$200 y RD$300 menos.
FAO sugiere almacenarlo
Directivos del Programa de Naciones Unidas para la Alimentación (FAO) se han enterado de que en República Dominicana hay una crisis por excedentes de arroz, lo cual les resultó curioso, pues todo apunta a que habrá escasez mundial por las inundaciones en Malasia e India.
Por esa razón, han sugerido al Gobierno que, sin importar los costos, mantengan el excedente en almacenes y que no lo vendan ni lo quemen, pues es seguro que en pocos meses se necesitará y además tendrá mayor valor en el mercado mundial. El problema es que mantener almacenado el arroz tiene un costo que las autoridades tienen que cubrir.
